Este joven, nacido en San Martín de los Andes, no baja los brazos ante los desafíos. Ama la naturaleza, recorrió la Patagonia y cinco países en bici y ahora, llegó a hacer 12 kilómetros por día en las aguas frías del lago. Y tiene nuevos planes…
El agua del lago Lolog a 16 grados, el viento que puede frenar el nado, un bote a remolque y la mirada puesta en el placer. Una brazada es un goce, un viaje es la vida misma. Así, con ese horizonte permanente se mueve por acá y por allá Sebastián Knudtsen, nacido a poca distancia de las aguas del lago que lo ven hacer en cinco días todo su recorrido. De playa en playa, disfrutando de 8 o 12 kilómetros por jornada.
Es cierto: la natación la lleva en la sangre, al punto de haber competido en varios lugares y ser parte de la selección neuquina. Pero lo que mueve ese cuerpo sobre el agua del Lolog es el placer del proceso, del viaje, no de obtener resultados. Ese es el secreto.
«Cada aventura deja aprendizajes y la posibilidad de estar con uno mismo», les dijo a los periodistas de Radio Nacional San Martín de los Andes.
Como andar en bici por la cordillera, por los caminos de la Patagonia o del mundo.
“Se animó a recorrer la Patagonia en bicicleta en 2015, que le llevó tres meses, hasta el límite de Uruguay y Brasil en 2017 durante seis meses y recorrer cinco países del sur de África por 10 meses en 2019”, recordó el sitio Realidad Sanmartinense.
“Allí descubrí que cada región tiene sus propias culturas y comportamientos
pero todos somos parte de un mismo planeta”, señaló en Radio Nacional.
Los primeros cinco días de este febrero lo vieron amigarse con la temperatura del agua, con el viento y el paisaje del Lolog, nadando con un bote inflable a remolque, adonde llevó los alimentos y equipos para sostener la travesía. A veces fueron 12 kilómetros, otras sólo 8 por las condiciones del tiempo.
Pero es el proceso, no el destino. Ese viaje entre playa y playa, en el agua o abrazando el cielo de la cordillera, boca arriba, es lo que alimenta la pasión de este joven.
El mapa del recorrido (que sólo muestra los lugares y no las sensaciones) indica que salió de Playa Bonita y pasó por Bahía Melón, Auquinko y otros sectores recónditos y bellísimos de las distintas márgenes del Lolog.
Ahora comienza otro proceso: subirse a la bici y arrancar hacia el sur del país. Y lo tendremos por allí, y por acá.